Ya no es relevante hablar de la convergencia entre el mundo de las tecnologías de la información y el de la producción de video al estilo convencional. La cuestión ya no es de expectativas: esta convergencia constituye un factor más en el mercado, un factor que posibilitó que en la NAB de este año apareciera un completo repertorio de opciones que permitirá, en un futuro próximo, que aun las operaciones noticiosas más pequeñas abandonen para siempre las cintas de video.
El problema inmediato para los operadores de nuestra región es el de siempre: los fabricantes están de acuerdo en el tipo de soluciones que ofrecen… pero la estandarización de estas nuevas soluciones está lejos y quizá nunca llegue.
Mensaje para las operaciones noticiosas: nuevamente la industria ofrece múltiples estándares. Habrá que pensar en plataformas diferentes para producción y para intercambio de material. Bienvenidos al futuro…
Caso 1: grabación en
discos duros
Registrar material DV o HDV en discos duros, conectados
directamente a una camcorder, no representa mayor
dificultad. Simplemente, se trata de solucionar los aspectos mecánicos
del montaje, generar un firmware que permita emular el
comportamiento de la grabadora de la camcorder y empezar
a trabajar. En NAB 2007 hubo una explosión de la oferta de este
tipo de dispositivos.
Algunos fabricantes de camcorders, como JVC, han optado por promover discos fabricados por otras firmas, como Focus. Sony presenta opciones propias, pero no tiene ningún inconveniente en facilitar a los fabricantes independientes la información necesaria para crear este tipo de dispositivos. Firmas tan serias como Maxell e Hitachi trabajan en esta línea, mientras decenas de empresas de garaje integran cajoncitos con discos duros IDE de 2.5”, que ofrecen especificaciones en apariencia idénticas a las de los grandes jugadores de la industria, a precios ridículamente bajos.
El uso de este tipo de aparatos es la ruta obvia y más sencilla para empezar una migración razonable a operaciones sin cinta. ¿A quién creerle en medio de esta confusión? ¿Vamos a creerle a quien ofrece elementos de alta calidad con el costo correspondiente o a quien plantea que los discos duros deben manejarse como elementos de corta vida, que pueden repararse con drives comprados en la tienda de la esquina? Difícil decisión. Es una variante del conocido enfrentamiento entre producto de marca y producto genérico.
La solución a este dilema está en un análisis juicioso de los flujos de fondos y las necesidades reales de la operación. Y quizás en renunciar a los discos duros para tomar otra de las opciones en las que la industria se ha puesto de acuerdo, como grabar en algún tipo de memoria de estado sólido.
Caso 2: grabación en
memoria flash
Todo empezó hace más de 20 años, cuando aparecieron los
primeros sistemas de grabación de video basados en chips de
memoria RAM. Primero fueron los sistemas de posproducción de
NEC, luego los servidores de estado sólido de Toshiba, las cache
recorders de los switchers de producción de gama
alta… y en 2004 apareció el sistema P2 de Panasonic.
Para hacer justicia, es necesario aclarar que el sistema P2 se basa directamente en la probada tecnología compact flash, aunque ha sido adaptado a las necesidades de la industria en función de robustez y desempeño. Este año, otros fabricantes anunciaron que seguirán la misma línea.
Ejemplos: Toshiba e Ikegami anunciaron una alianza para promover un sistema de cartuchos de memoria flash de alta capacidad, llamado GigaFlash. En principio se habla de cartuchos con capacidades de 120 GB, y el formato de grabación está completamente abierto –de hecho, se habla de cámaras soft–. Un factor interesante: Ikegami es socio de Avid hace más de diez años, luego es de esperar que los productos GigaFlash sean compatibles con los sistemas de edición de Avid desde el principio.
Sony anunció el próximo lanzamiento de XDCAM-EX, un sistema de grabación basado en el estándar ExpressCard, que empieza a reemplazar las conexiones PCMCIA en los equipos portátiles de última generación. En principio, Sony ofrecerá tarjetas de 8 y 16 GB que grabarán material MPEG-2 con muestreo 4:2:2 y ancho de banda de hasta 50 Mbps. Inicialmente, XDCAM-EX se implementará sobre cámaras de tipo “Pro”, pero es posible que en un futuro próximo veamos cámaras ‘grandes’ con un slot XDECAM-EX adicional.
Panasonic se ha concentrado en mejorar la capacidad de las tarjetas P2 –que próximamente alcanzarán 16 GB– y en hacer más eficientes los sistemas de grabación. Gracias al uso del codec AVC-HD es posible registrar en cada tarjeta el doble del material que podría grabarse usando DVCPRO-HD, conservando las ventajas de la codificación intraframe. Un dato suelto: Ya empezaron a aparecer proveedores de tarjetas P2 distintos de Panasonic…
Por otro lado, Panasonic lanzó una versión profesional de sus camcorders domésticas, que registran material en tarjetas de memoria SD. Se trata de la camcorder AG-HSC1U, un juguete con tres sensores de 1/4” que maneja tarjetas de memoria SD de hasta 4 GB y cuesta algo más de US$2000.
Y mientras otros fabricantes hacen importantes esfuerzos de investigación y desarrollo, los representantes de JVC se limitan a decir que con un dispositivo externo de grabación que opere como un disco duro, sus cámaras HDV 720p van a poder controlarlo sin dificultad alguna. Por otro lado, no olvidemos que hacia 1999, JVC fue el primer fabricante en ofrecer una camcorder con funciones de streaming incorporadas.
Caso 3: Infinity
Finalmente, Infinity se hizo realidad: ya empezaron los
despachos. El sistema de grabación en discos duros removibles
RevPro empezó a llegar a manos de los clientes de Thomson desde
abril. En NAB se anunció un aumento en la densidad de grabación,
que llevará la capacidad de grabación de los cartuchos a 70 GB,
con velocidades de transferencia de hasta 110 Mbps; también se
anunció informalmente la intención de Thomson de soportar
nuevos sistemas de grabación según las necesidades de sus
socios.
En principio, Infinity ofrece grabación SD en DV de 25 Mbps, grabación HD usando un codec basado en JPEG-2000 y una opción para registrar flujos MPEG-2 4:2:2 con señales HD de hasta 50 Mbps. Las camcorders Infinity ofrecen operación dual SD/HD, conectividad ethernet y soportan cualquier sistema de almacenamiento del mundo de los PCs. Obviamente, Infinity es soportado por las soluciones para salas de noticias digitales de Thomson/Canopus, y estamos a la espera de las reacciones de otros fabricantes.
Caso 4: XDCAM/XDCAM-HD
Por el lado de la grabación en los discos azules, aparece una
noticia breve pero sustanciosa: la capacidad de grabación
aumenta a 46 GB por cartucho –más de tres horas de DVCAM a
25 Mbps en cada plato–. Mientras tanto, aparecen nuevos
proveedores de discos: Maxell y TDK, por ejemplo, empezaron a
ofrecer sus cartuchos XDCAM de 23 GB, por ahora.
En cuanto a XDCAM-HD, las cosas siguen más o menos igual: se graba una especie de super-HDV a 35 Mbps con cuatro canales de audio. El drive incorporado en la PDW-F330 soporta una velocidad de transferencia de 70 Mbps y todo parece indicar que las cámaras permiten la actualización de codecs mediante cambios de firmware. Según parece, Sony ha decidido guardar un as en la manga.
Caso 5: enlaces móviles
Por el lado de enlaces inalámbricos, las cosas están claras:
absolutamente todos los proveedores de sistemas de radio están
ofreciendo enlaces HD, que pueden montarse directamente “en
la cola” de una camcorder. Algunos distribuyen híbridos de
transmisión y almacenamiento. Hay opciones con y sin compresión,
de todos los rangos y potencias imaginables… y no hay un
acuerdo claro en cuanto a las frecuencias en las que estos
sistemas deben operar. Quizás en este frente sea mejor esperar a
que los organismos regulatorios pongan algo de orden.
Como siempre, muchas de las novedades de NAB son anuncios de futuros acontecimientos. Algunos productos tendrán éxito, otros no. Algunos se convertirán en realidad, otros no. Pero la tendencia está clara: la industria se ha puesto de acuerdo, y la cinta de video entra en su recta final.
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