Sonido para TV: Consejos útiles

Comienza el rodaje. Está todo preparado. El director grita "acción", pero previamente debe revisar las diferentes áreas: ¿iluminación?... -listo, ¿cámaras?... -listo, ¿sonido? -... Aunque esta última área parezca algo tan simple como poner un micrófono, pasar por la consola mezcladora hasta el grabador y listo, esto no es tan así. Existen una serie de factores que afectan este proceso y que deben ser tomados en cuenta para lograr una buena captura de sonido.

En primer término, este factor será sumamente importante a la hora de determinar qué tipo de micrófonos se utilizarán y en qué posición ubicaremos los mismos. Esta determinación estará determinada también de acuerdo con el tipo de acción que se desarrolle: si estamos grabando una conversación en la calle con pausas o silencios entre cada interlocutor, utilizaremos micrófonos tipo shotgun altamente direccionales, como el Sennheiser MKH-816 o el Audio Technica AT4071, para tratar de captar únicamente la voz; luego en algún momento de descanso será bueno grabar algunas tomas del ambiente para ser mezcladas posteriormente con la voz y la música.

Si el rodaje es en un recinto cerrado debemos tener en cuenta el grado de reverberación. Los lugares "vivos", o altamente reverberantes, acentúan todos los sonidos, incluso los no deseados. En estos lugares parecerá que los micrófonos tienen mayor grado de captación a grandes distancias, que las voces tienen más cuerpo, y así será; pero también estarán llegando al micrófono una gran cantidad de ruidos no deseados como las reflexiones de la voz, los movimientos de cámaras, los ruidos del ambiente, etc. Todos estos ruidos afectarán la inteligibilidad de la toma, y si hay algo que debe ser cuidado por sobre todas las cosas, es la claridad de las palabras, mas allá de las músicas, efectos, ambientes, etc. Una buena solución para lugares de estas características puede ser la de utilizar paneles acústicos transportables, que son como pizarras con ruedas, recubiertas con materiales absorbentes como la lana de vidrio. Estos paneles se ubican a ambos lados del cuadro de cámara (lo más cerca posible) y absorben las reflexiones del resto del recinto, aislando acústicamente la acción.

Por el contrario en lugares "muertos", o poco reverberantes, todos los sonidos tienen mucha menos intensidad, y se debe procurar una buena cercanía al micrófono para captarlos.

Este es otro factor fundamental a tener en cuenta. Una buena ubicación de los micrófonos y un manejo adecuado de los mismos es lo que garantizará la buena toma y nos evitará muchos problemas. Tomemos el ejemplo de un programa con una mesa de debates. Cada una de las personas de la mesa tendrá colocado un micrófono corbatero o de solapa, como puede ser la serie 7000 de Audio Technica. Estos micrófonos son altamente sensibles, por lo cual deben estar bien colocados ya que el mínimo roce de la ropa producirá ruido. También el operador debe estar atento para (dentro de lo posible) ir elevando las ganancias a medida que una persona comienza a hablar, de lo contrario se escucharán también los ruidos (no deseados) de las otras personas de la mesa al moverse, o al hablar entre sí, etc. Una buena ayuda en este tipo de programas es la de colocar también uno o dos micrófonos omnidireccionales de mesa o pzm (pressure zone microphone) como respaldo. Estos micrófonos estarán tomando a todas las personas de la mesa y nos pueden servir como complemento o en el caso del mal funcionamiento de alguno de los corbateros. Otra opción muy útil es usar un micrófono tipo shotgun corto controlado por una jirafa. Está opción permitirá también acercar el micrófono al público en caso necesario. Un buen micrófono para interiores es el AT4073a de Audio Technica. Así también el operador de la jirafa debe estar altamente familiarizado con el uso de la misma, para evitar sombras, fueras de campo, micrófono en imagen, etc. Un error muy frecuente en programas que utilizan esta técnica es el que se conoce como fuera de campo cuando una persona empieza a hablar: recién luego de algunos segundos (cuando el micrófono llega hasta su posición) se comienza a escuchar la voz de la persona. Por eso se debe tener muy en cuenta el equipo a utilizar, la acción a desarrollar, las interlocuciones, las pausas, etc., para prevenir este tipo de inconvenientes.

En cuanto al monitoreo se deben tener en cuenta algunos factores:

1- El monitoreo de piso es sólo de referencia; no debe estar a un volumen demasiado importante ya que esta señal de monitoreo se estará metiendo nuevamente en los micrófonos y realimentará todo el sistema, produciendo acoples y ambientes no deseados. Es aconsejable utilizar monitoreo por auriculares para evitar estos inconvenientes.

2- En el caso de música en vivo en el piso, los monitores deben estar cerca de los músicos para poder mantenerlos a un nivel relativamente bajo. Es necesario tener en cuenta que en este caso los músicos necesitan un poco más que una simple referencia, para poder "sentir" su música. De esta forma se sentirán más cómodos y darán un mejor show, sobre todo si es sólo un cantante con sus pistas de playback en un CD.

3- En el momento en que una VTR este en el aire, es posible subir mínimamente el nivel de monitoreo de piso (si fuera necesario), siempre y cuando los micrófonos de piso estén cerrados.

4- En el caso de un programa con llamados telefónicos, la persona de producción que hable previamente con el televidente que llamó, debe indicarle al mismo que se aleje o baje el volumen de su televisor una vez al aire. Esto evitará también problemas de acoples (la señal sale del televisor y realimenta el sistema a través del micrófono del teléfono).

5- Es importante contar con monitoreo personal o de auriculares, ya que por los mismos se podrán enviar no sólo los sonidos que salen al aire, sino también indicaciones del director o del productor a los actores, moderadores, etc.

Finalmente, todo este trabajo recae sobre el operador de sonido ubicado en la consola del cuarto de control. Esta persona debe estar muy atenta y en constante contacto con el director de cámaras, el operador de VTR, el productor, el coordinador de emisión al aire, etc., para ir siguiendo prolijamente los cambios en el guión del programa u hoja de rutina.

El operador tiene el control y debe ir mezclando, no sólo los micrófonos, sino también el sonido de todos los periféricos como las VTR´s, comunicaciones telefónicas, reproductores de discos compactos, etc. Un buen consejo previo a cualquier producción es probar previamente todas estas fuentes de sonido para balancearlas, que estén todas en el mismo plano, que tengan la ecualización adecuada. Es muy importante también que todas las VTRs tenga su salida balanceada al mismo nivel. Todos estos detalles, por pequeños que parezcan, agilizarán la tarea del operador y le brindarán mayor concentración y seguridad para el momento del programa.

Estos factores, que al principio parecen demasiados, luego se van incorporando con la práctica. Pero es bueno aprovechar todo el tiempo que se tenga, previo a la producción, para dejar el sistema probado, ajustado y funcionando.