Entrenamiento para América Latina

César T. Ossa: El Centro de Medios Audiovisuales (CMA) se dedicaba anteriormente a prestar servicios a las diferentes áreas de la Universidad Javeriana, y pasó ahora a ser un centro de entrenamiento para América Latina con la responsabilidad de capacitar a los profesionales con trayectoria en el medio, en el trabajo con alta tecnología para operaciones de posproducción. A partir de ahora, este centro es el único en la región aunque la transición no ha sido fácil, porque pasamos de tener recursos mínimos a contar con un gran desarrollo de tecnología.

C.T.O: Lo primero que se debe tener en cuenta para enfrentar el desarrollo de un proyecto como estos es: Establecer qué es lo que se quiere con exactitud desde un comienzo. Cuando me refiero a esto estoy indicando la necesidad de definir cuál es el objetivo.

De acuerdo con mi experiencia en esta industria siempre he visto que en Colombia y en varios países de América Latina, la formación o la preparación de los editores se adelanta en forma empírica y eso me hizo plantearme las siguientes preguntas: ¿Por qué no darle a los estudiantes y a esos profesionales empíricos la oportunidad de estudiar o prepararse en el campo de las nuevas tecnologías para posproducción? Existen algunas academias en el mundo que lo hacen pero, ¿con qué tipo de tecnología? ¿A qué costo? ¿Cuáles son las desventajas para quienes no tienen formación en el idioma inglés? Y, finalmente, debemos pensar que si queremos ser competitivos en el ámbito internacional, es necesario tener en cuenta que esto no se puede lograr con cualquier tipo de software o de recursos.

C.T.O: En principio el proyecto estaba pensado para los estudiantes de la Universidad con una tecnología mínima, pero cuando éste fue aprobado en Canadá, ellos lo pensaron con unas dimensiones mayores, yo estaba pensando en unas salas de edición no-lineal simples y ellos se fueron a las grandes ligas, algo muy bueno para la Universidad, el país y América Latina. Este proyecto no hubiera sido posible sin el respaldo, lógicamente, de la Universidad, pero también fue determinante la ayuda de Discreet Logic Latinoamérica en cabeza de Miguel Rodríguez.

El proyecto aprobado inicialmente incluyó cinco salas de edición, tres salas de graficación y una sala de composición digital y efectos especiales. Esto determinó la manera como se debía abordar la segunda parte del proyecto porque no se trataba solo de instalar los equipos necesarios para cada sala de edición, habilitarlos en un pequeño espacio y asignar a cada una de ellas un operador.

C.T.O: La Universidad aceptó contratar una empresa especializada en Ingeniería de Televisión. En nuestro caso la compañía escogida para ello fue SEEL Ltda. Esto más que una necesidad es un consejo para quien quiera desarrollar un proyecto de estas características. Sin importar la magnitud del mismo, siempre se debe contar con la asesoría de un ingeniero o de una empresa especializada en ingeniería de TV. Este tipo de instalaciones no involucra simplemente la compra de equipos, implica también la adecuación de los espacios para ello.

Es necesario comenzar por el diseño y la realización de planos de disposición de las salas, para aprovechar el espacio al máximo. Para nuestras nuevas facilidades se desarrollaron muchos planos antes de lograr uno definitivo. Esto le permitió a arquitectos y diseñadores comenzar a tomar decisiones acerca de aspectos básicos como el tipo de materiales, divisiones, espacios e iluminación. Como dato interesante, el equipo de diseñadores y arquitectos tuvo la experiencia de visitar diferentes instalaciones especializadas, estudios de TV, casas posproductoras y canales de televisión, para lograr hacerse una idea de lo que se estaba buscando, ya que no hay profesionales dedicados únicamente a este tipo de construcciones.

C.T.O: El Centro tiene cinco estaciones de edición no lineal Octane con software Smoke, tres estaciones de trabajo O2 con software Effect y una estación de trabajo Onix con software Inferno. Estas estaciones son parte de la línea de productos de Silicon Graphics. Además de esto, contamos con un estudio adecuado para la realización de efectos especiales y un laboratorio de radio que opera sobre la plataforma especializada Dalet, con estaciones de trabajo profesional. Esto convirtió al CMA en uno de los centros de posproducción más desarrollados en Latinoamérica.

C.T.O: Al ingresar a cualquiera de las salas de edición lo que se encuentra es un monitor de computadora, un teclado, un mouse, y un tablero, porque todas las unidades centrales de procesamiento (central processing unit-cpu) están ubicadas en una sala de control maestro. Este es uno de los trabajos más valiosos, la obra de ingeniería es muy importante, puesto que este es el corazón del centro. En ese sitio es donde se procesa toda la información de audio y video, es el lugar en donde se encuentran los sistemas de comunicación con las diferentes salas y en donde se reciben y distribuyen todas las señales mediante un complejo diseño de cableado.

Como este es un sitio pensado para actividades de entrenamiento y capacitación, se construyeron tres salones para los estudiantes que vendrán de los distintos países de Latinoamérica. Cada uno de éstos espacios tiene una pantalla de plasma para ampliar la imagen que proviene de la computadora y evitar que deban atender las sesiones de instrucción alrededor del monitor de una estación de trabajo.

Después de haber definido los planos arquitectónicos, los planos de ingeniería para video y audio, faltaban dos cosas muy importantes: el aire acondicionado y la parte eléctrica. El aire acondicionado es fundamental para cualquier equipo porque en la medida que pasan las horas de trabajo la operación de los sistemas genera un incremento en la temperatura, esto implica el requerimiento de una temperatura adecuada, sin que sea tan importante si ésta es de 18 grados centígrados, 20 ó 22. Lo importante en este caso es que la temperatura sea constante. Para esto se debe tener en cuenta el espacio físico en donde se hará la instalación de los sistemas de manejo. Para nuestras instalaciones se necesitó un sistema con capacidad de 25 toneladas para acondicionar todos los espacios. El Centro dispone de un estudio de televisión, laboratorios de fotografía y un estudio de radio. El sistema de enfriamiento requiere de un espacio aproximado de 10 metros cuadrados y, un espacio adicional para los tanques de agua que alimentan el sistema y las bombas que lo impulsan. Esto, en resumen, es otra obra independiente que requiere el diseño de los planos respectivos.

Otra de las preocupaciones que siempre tuvimos desde que se inició este proyecto es lo relacionado con la distribución eléctrica. No se trata simplemente de instalar polos a tierra o establecer que el flujo de energía debe ser constante, en este caso, la cantidad de equipos y el consumo de energía de los mismos hizo necesaria la instalación de una subestación solo para el CMA. Esta determinación exigió destinar un nuevo espacio de 20 m cuadrados. Obviamente, esto exigió también trabajo de diseño, planos y todo lo demás.

Pero esto no era todo. La siguiente pregunta fue: ¿qué pasará cuando haya un corte de energía? Para atender las operaciones que pretende este Centro se debe contar con un sistema de respaldo de energía. Y ¿cuál fue el siguiente paso? Adecuar un nuevo espacio para una unidad de poder UPS que ocupa un nuevo espacio de 7 metros cuadrados, porque se requiere una capacidad mínima de operación de 36KVA y 7 minutos de duración si se quiere contar con el tiempo suficiente para almacenar los archivos en uso y apagar correctamente las estaciones de trabajo y todos los demás sistemas.

La idea inicial no es montar algunos muebles, unidades de soporte, conectar los equipos y encenderlos. Esta tecnología funciona a partir de entradas y salidas de diferentes señales. El equipo con el cual contábamos antes de iniciar este proyecto es básicamente análogo y éste factor obligó a cambiar todos los planos de la sala de control maestro.

Estos cambios exigieron una inversión adicional en sistemas de conversión análogo-digital-análogo para señales de audio y video, monitores para señales digitales y sistemas de enrutamiento. Todos estos nuevos recursos representaron una cifra muy importante que se debió agregar al presupuesto general del proyecto.

La comunicación entre todos los equipos y sistemas para permitir la lectura de archivos, compartir materiales sin necesidad de bajar los archivos a otro medio para llevarlos a las diferentes estaciones de trabajo, nos llevó a tomar la decisión de comprar un conmutador (equipo para sistemas de Internet diferente de un hub) para permitir la intercomunicación entre los equipos en tiempo real y contar con una verdadera disponibilidad de acceso a los archivos. De esta forma podemos compartir trabajos de edición, efectos, graficación y animaciones.

Por fortuna, este equipo no ocupa mucho espacio, requiere tan sólo dos metros cuadrados aproximadamente.

Este es un punto muy importante. Como resultado de todo el proyecto se realizó un manual de funciones para cada uno de los integrantes del equipo con la idea de que cada uno sepa lo qué debe y puede hacer. Además, se desarrolló un manual de procedimientos para que el cliente tenga la información suficiente acerca de la utilización de los recursos y servicios del Centro, y pueda sacar el mejor provecho de esta tecnología.

Este es el primer centro de entrenamiento de esta magnitud en América Latina y pronto estará disponible para quienes tengan interés en recibir capacitación para el manejo de esta tecnología, desde luego, con el respaldo de Discreet Logic y la Pontificia Universidad Javeriana.