Chile. La Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica y DirecTV realizaron la segunda "Mesa de debate UC", en torno a la piratería y los distintos escenarios en que se desarrolla en la actualidad.
Esta instancia busca abrir un espacio de conversación sobre este fenómeno que afecta a la industria de la entretención en su conjunto, y contará con representantes de autoridades regulatorias, parlamentarios, y organizaciones no gubernamentales, así como una diversa representación de la industria, del ámbito tecnológico y de entretención.
Este segundo encuentro, tras una primera sesión dedicada a la industria del entretenimiento, fue dedicado a la TV de pago, una industria que, según estimaciones, presenta pérdidas en torno a los 70 millones de dólares anuales a causa del comercio ilegal de sus productos.
El debate contó con la participación del senador Guido Girardi; la directora del Departamento de Estudios del CNTV, María Dolores Souza; Jorge Carey, director de CHV; Claudio Ruiz, abogado y Director Ejecutivo de la ONG Derechos Digitales; Nicolás Schubert, Jefe de gabinete Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (DIRECON); Eileen Frodden, abogada del Departamento Internacional y Políticas Públicas del Instituto Nacional de Propiedad Intelectual (INAPI), entre otros.
Se estima que en Chile hay 300.000 decodificadores dedicados a la transmisión ilícita de TV paga. Esto provoca efectos negativos a los usuarios que ven afectada la calidad del servicio, y pérdidas millonarias cada año por la vía de evasión de impuestos.
Según las cifras de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), en Chile la piratería ilegal sigue siendo un problema relevante tanto para el Estado como para las empresas. Si el crecimiento de la industria de televisión de pago era de un 10% de abonados entre 2013 y 2014, en el periodo de 2015- 2016 es de un 3,5%.
Mientras en un contexto latinoamericano, existen alrededor de 16 mil portales o páginas piratas que ofrecen contenido ilegal, a través de los cuales, 300 millones de latinoamericanos en forma mensual ven televisión, internet y otros productos audiovisuales de manera irregular, es decir, piratean los contenidos de los autores o realizadores a lo largo del continente.
El tercer encuentro tratará la piratería que afecta a las industrias tecnológicas como los desarrolladores de software y video juegos, así como el perfeccionamiento permanente por crear tecnología que bloquee el comercio ilícito y la piratería.
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