México. En años recientes, el segmento de televisión restringida y servicios empaquetados registra una dinámica muy superior a la del resto de los componentes del sector de telecomunicaciones en México.
Este desempeño se sustenta en las robustas inversiones del segmento para la provisión convergente de mejores capacidades de transmisión de video, voz y datos. Ello ha logrado atender el crecimiento acelerado de esta demanda por conectividad y entretenimiento.
Ingresos al Alza. Tan sólo en el tercer trimestre de 2020 (3T-2020), los ingresos de las empresas de TV de Paga ascendieron a $28,508 mp, esto es, 7.0% más en su comparativo anual. Con ello, el segmento se posiciona como el más dinámico y se consolida como el segundo de mayor contribución en los ingresos totales de la industria, con una ponderación de 22.4%.
Precisamente, las mejores condiciones de oferta de estos servicios en términos de disponibilidad, cobertura, diversidad, calidad y asequibilidad han impulsado no sólo la contratación de servicios de video que alcanzan ya 20.8 millones de suscripciones al 3T-2020 (+1.6% de crecimiento anual), sino también de aquellos de telefonía fija (21.9 millones de líneas, +3.7%) y de banda ancha fija (21.4 millones, +9.6%).
Ello a través de empaquetamientos de doble y triple play, aunque desde hace unos meses, los usuarios mexicanos contamos con ofertas de hasta quíntuple play, al incluir además servicios móviles y de acceso a plataformas de video bajo demanda por internet.
Preferencia por Empaquetamientos. De acuerdo con la “Segunda Encuesta 2020, Usuarios de Servicios de Telecomunicaciones”, un número creciente de usuarios del servicio de televisión de paga (19.6% del total) contratan sus servicios en las modalidades de doble play y triple play, con telefonía y/o internet fijos.
Este es un mercado que, a pesar de no quedar exento de los efectos de la recesión económica y de la desviación de preferencias por otras alternativas de entretenimiento directo en el hogar, esto es, las plataformas de streaming por suscripción y gratuitas, mantiene un dinámico ritmo de crecimiento.
Incluso, en México ha logrado contener en alguna proporción la tendencia mundial a cortar el servicio de TV de paga, conocido como cord-cutting en inglés.
Prospectiva sobre su Dinámica en 2020-2021. Se proyecta que los ingresos del segmento de TV de paga y servicios convergentes registren un crecimiento anual de 7.5% en 2020, que contrasta significativamente con el previsto para el sector en su conjunto (-1.1%), ante la fuerte caída en la contratación y utilización de las telecomunicaciones móviles, durante la primera mitad de 2020.
Las condiciones sociales y económicas por la pandemia han resultado en un ‘empujón digital’, por la aceleración en la adopción y aprovechamiento de la conectividad a partir del confinamiento y la pandemia, para dar continuidad a las actividades productivas, escolares, informativas, culturales, románticas, de entretenimiento, entre otras, resultando en un catalizador de la conectividad.
Es previsible que la creciente contratación de servicios de conectividad y el mayor desembolso en mayores velocidades de descarga de datos por internet impulsen el gasto en las facturas de empaquetamientos con banda ancha fija y consecuentemente, los ingresos de las empresas cableras convergentes.
La expectativa es que el alza en la preferencia por empaquetamientos y las mayores capacidades de las redes de telecomunicaciones fijas de estos operadores, se traduzcan en un crecimiento de doble dígito de este mercado en 2021, apoyado así en la recuperación económica y del poder adquisitivo de los hogares en México.
Texto escrito por Ernesto Piedras, de The Competitive Intelligence Unit.
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