A finales de septiembre se reunieron en Bogotá los socios de la PRAI para consolidar la entidad y definir el trabajo de los próximos años. Colombia asumió la presidencia.
Si bien es cierto que las tecnologías para producir y consumir contenidos audiovisuales avanzan rápidamente y generan cambios a los cuales canales, productores, operadores de TV por suscripción y televidentes, en materia de regulación pareciera que las cosas no van al mismo ritmo.
Richard Santa S.
Desde hace cinco años, los países de América Latina y Centroamérica vienen adelantando reformas a las políticas que rigen la televisión, algunas basadas en la tecnología y otras en motivaciones políticas. Pero la pregunta que todos se hacen es si estos cambios les ha preparado para enfrentar los los retos que traen consigo las nuevas realidades para el sector.
Cómo prepararse, qué se debe regular y cuál es el límite de las nuevas normas, fueron algunas de las preguntas que se analizaron durante la pasada reunión de la Plataforma de Reguladores Audiovisuales de Iberoamérica, PRAI, que se realizó en Colombia a finales de septiembre y que reunió a representantes de 14 países.
En su intervención durante el foro, el Ministro de TIC de Colombia, Diego Molano Vega, causó polémica con su presentación, debido a que dio una visión que algunos calificaron de fatalista para el futuro de la televisión y los retos que proponen las nuevas tecnologías.
Molano Vega sostuvo que “La televisión surgió con un modelo de sostenibilidad basado en la publicidad. Los anunciantes eran quienes generaban los ingresos para que los productores realizaran sus programas, los emitieran en la TV pública y en los hogares estaban todos reunidos viendo la TV. Con la llegada de la TV por suscripción se multiplicaron los contenidos y las opciones de canales para publicitar. Igualmente disminueron los ingresos de los canales y aumentaron los televisores por hogar, segmentando las audiencias. Ahora, el internet volvió a modificar el panorama con nuevas formas de ver el contenido a través de OTT y VoD, en plataformas como Youtube y Netflix, brindando aún más opciones para los anunciantes”.
Agregó el Ministro colombiano, a modo de ejemplo, que hoy la mayor partede la torta publicitaria la tiene Google y su portal de videos Youtube, que este año llegó al millón de anunciantes, por encima de los canales tradionales que en un momento ocuparon el primer lugar. resaltó que el presupuesto de marketing de las empresas no ha aumentado y se debe distribuir entre más opciones.
Y si se tiene en cuenta que la TV paga e internet acabaron con las fronteras, es decir, una persona emite un contenido desde cualquier lugar y que puede verse en cualquier parte, se dificulta alos reguladores ejercer el control. En este panorama, ¿cuál es el rol del estado? ¿Cuál es el rol de la TV pública? ¿cómo se regulan los contenidos en las nuevas plataformas sin fronteras? ¿cómo proteger al prosumidor? ¿cómo proteger los derechos de autor? ¿cómo desarrollar los contenidos locales y fortalecer la indsutria local siendo buen negocio? ¿Cuál debe ser el nuevo esquema tributario? Fueron algunas de llas preguntas propuestas por Diego Molano al finalizar su intervención.
Larga vida a la TV
Una de las personas que estuvo en desacuerdo con el Ministro fue Eladio Gutiérrez, español especialista en televisión digital y con amplia trayectoria en el tema. Aseguró que sobre la convergencia hay mucha palabrería pero poco análisis de la realidad. Y puso como ejemplo estadísticas recientes de Reino Unido, en las cuales solo un 10% de los televidentes accede a los contenidos desde dispositivos móviles y el 85% lo hace de manera tradicional.
“Mi apuesta es que le quedan largos años de vida, muchos años de vida a la TV lineal. La posición del espectador frente al televisor es eminentemente pasiva, no un proceso activo de decir ahora quiero ver este programa entonces voy a entrar a internet a la página de la productora. Eso no se ha dado con la velocidad que algunos auguraban. Yo creo que hay mucho de palabrería y poco de realidades plausibles y medidas objetivas”, comentó Eladio Gutiérrez
En el mismo sentido se pronunció Ricardo Villa, director medios interactivos de Televisión Española, quien destacó que en los últimos diez años subió el consumo de televisión diario entre los expañoles, pasando de 192 a 300 minutos.
“Aunque a la televisión lineal le espera larga vida, si debe reinventarse para enfrentar los nuevos retos tecnológicos. Los canales deben salir del televisor, hoy producir una serie requiere incluir aplicaciones para dispositivos móviles, juegos, generar interés en la historia para que sigan hablando e interactuando con ella mientras se emite el nuevo capítulo”. Sobre la necesidad de actualizar la regulación teniendo en cuenta las realidades del futuro cercano con la convergencia entre la TDT y las nuevas formas de transmisión, indicó Eladio Gutiérrez que ni en América Latina ni en ningún otro país ha sido considerado, por lo cual no debe ser motivo de preocupación.
Análisis regional de la Unesco
A su tiempo, Gustavo Gómez, investigador de la Unesco, indicó que la región está revisando las leyes de TV, pero no están respondiendo a las nuevas realidades como la digitalización y la convergencia. Están siendo leyes dispersas o parciales. “¿Se regula TV o qué? No deberíamos estar regulando la televisión, hay que crear leyes de servicios de comunicación audiovisual, incluyendo las plataformas lineales como la televisión tradicional y las no lineales como el video bajo demanda. Es basar la regulación de acuerdo a los servicios y no a las tecnologías, como pasa en América Latina. Hoy terminan siendo ineficaz y débil para controlar y sancionar”, comentó el representante de la Unesco.
También señaló que las nuevas regulaciones deben buscar proteger los derechos de autor y los derechos fundamentales, entendiendo que éstos parten de la libertad de expresión. Para lograrlo, se debe garantizar acceso a los servicios de TV abierta, internet y propender por menos concentración de medios de comunicación en los mismos dueños, situación común en América Latina que genera centralización de la información y afecta la libertad de expresión.
Colombia asume la presidencia de la PRAI
La Plataforma de Reguladores Audiovisuales de Iberoamérica, PRAI, es una asociación de entes reguladores que se conformó en 2010 con el fin de potenciar y apoyar el trabajo de las entidades independientes de regulación de los países iberoamericanos, en su labor de garantizar los derechos humanos, la diversidad cultural y la representatividad en los contenidos audiovisuales emitidos y distribuidos a las diversas audiencias.
Durante la reunión en Bogotá, organizada por la Autoridad Nacional de Televisión, ANTV, los socios fundadores aprobaron los estatutos para la Plataforma. Entre otros puntos, se destacan ser un espacio de reflexión conjunta sobre la regulación de la televisión y otras formas de audiovisual; constituirse en una plataforma de intercambio de información sobre aspectos legales y normativos de interés común a todos los reguladores, y configurarse como espacio para la discusión y solución dialogada de problemas y disensiones entre las entidades reguladoras. Las lenguas de trabajo son el portugués y el castellano.
En la misma reunión, se definió que habrá una presidencia rotativa con un periodo de dos años. Como primer país presidente fue designado Colombia, a la cabeza de Beatriz Quiñones Cely, quien hace parte de la Junta Nacional de Televisión, de la ANTV. El país que ostente la presidencia albergará también la sede de la Plataforma. La vicepresidencia será ejercida por Chile.
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