Latinoamérica. Siete organismos de las Naciones Unidas colaboran, con apoyo del Foro Económico Mundial y el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD), para pedir que se revise el sistema por el que se rige actualmente el sector de la electrónica, con objeto de refrendar los esfuerzos internacionales encaminados a subsanar los retos que plantean los residuos electrónicos.
En el informe se aboga por una colaboración sistemática con los principales fabricantes, las pequeñas y medianas empresas (PYME), el sector académico, los sindicatos, la sociedad y diversas asociaciones en el marco de un proceso deliberativo que permita reorientar dicho sistema y reducir la cantidad de residuos electrónicos que se generan cada año, cuyo valor económico rebasa el PIB de la mayoría de los países.
Cada año se desechan aproximadamente 50 millones de toneladas de residuos electrónicos y eléctricos (ciberresiduos), cuyo peso total es superior al de todos los aviones comerciales fabricados hasta ahora. Su valor económico es de 62.500 millones de dólares, superior al PIB de la mayoría de los países.
Menos del 20 % de esa cantidad de residuos se recicla oficialmente. Millones de personas trabajan en todo el mundo (más de 600.000 únicamente en China) de forma oficiosa en labores de desecho de residuos electrónicos, en la mayoría de los casos en condiciones laborales que repercuten adversamente tanto en la salud humana como en el medio ambiente.
En el informe "A New Circular Vision for Electronics - Time for a Global Reboot", presentado en Davos, se señala que la computación en nube y la Internet de las Cosas (IoT), entre otras tecnologías, facilitan la "desmaterialización" gradual de la industria electrónica.
Por otro lado, con objeto de aprovechar el valor económico de los materiales de los residuos electrónicos y promover cadenas de valor circulares a escala mundial, en el informe también se incide en la utilización de las nuevas tecnologías para promover modelos de negocio basados en servicios, así como mejorar el seguimiento de los productos y los programas de fabricantes o minoristas destinados a la recuperación de productos.
En el informe se pone de manifiesto que la eficiencia de los materiales, las infraestructuras de reciclaje y el aumento de la cantidad y la calidad de los materiales reciclados a tenor de las necesidades de las cadenas de suministro de productos electrónicos serán fundamentales para las actividades de producción en el futuro.
Si se fomenta el sector de la electrónica sobre la base de un conjunto de políticas pertinente y se gestiona de forma adecuada, podrían crearse millones de puestos de trabajo decentes en todo el mundo.
En el informe conjunto se hace un llamamiento a la colaboración con multinacionales, PYME, empresarios, instituciones académicas, sindicatos, la sociedad y diversas asociaciones con objeto de fomentar una economía circular en el sector de la electrónica, en la que se prevea el volumen de residuos, se reduzca su incidencia medioambiental y se cree trabajo decente para millones de personas.
Deje su comentario