Los equipos modernos de luz fría han ido evolucionando a partir de los sistemas HMI, lámparas de alta eficiencia que producen luz concentrada de alta temperatura de color y reducen notablemente las emisiones de calor. Esto los hace especialmente adecuados para iluminar grandes áreas y suplementar luz natural en exteriores.
Varios fabricantes europeos y americanos han introducido mejoras sustanciales de diseño, tanto en lámparas para iluminación de estudio como en equipos para exteriores, que facilitan su manejo y los hacen competitivos con los sistemas convencionales.
Sin embargo, las lámparas tipo HMI tienen un costo relativamente alto y su mantenimiento resulta más oneroso que el de los equipos convencionales de lámparas halógenas, por lo cual muchas operaciones de bajo presupuesto no pueden utilizarlas. Además, la mayoría de estas lámparas utilizan fuentes de poder pesadas y voluminosas que, en algunos casos, dificultan su uso en exteriores.
Muchos realizadores se ven obligados a trabajar con luces de tungsteno filtrado y deben someterse a las variaciones de temperatura de color ocasionadas por el desgaste de las bombillas halógenas y el deterioro de los filtros de gelatina. A la vez, es común no disponer de estudios adecuados de manera conveniente, por lo que deben utilizarse lámparas de piso en aplicaciones fijas y en exteriores, lo cual acelera el deterioro mecánico de los equipos.
En la mayoría de los casos este deterioro representa un aumento en las emisiones de calor, por el desajuste de los elementos disipadores, lo cual afecta también la duración de las bombillas halógenas. Una lámpara convencional que no maneje adecuadamente el calor no puede ofrecer un desempeño estable y, en muchos casos, puede esperarse un deterioro visible de la calidad de la luz en cortos períodos de tiempo.
Las lámparas de luz fría generan menos calor que las bombillas convencionales, lo cual permite simplificar su construcción y utilizar materiales más livianos en su fabricación, incluidos algunos tipos de material plástico. Además, son más eficientes porque ofrecen mayor emisión lumínica por el mismo consumo de corriente de los equipos convencionales.
Los sistemas más modernos incluyen mecanismos electrónicos de control que aseguran un desempeño estable de las lámparas al mantener un nivel constante de emisión lumínica y la misma temperatura de color durante toda la vida útil de los elementos fluorescentes.
Por otra parte, el costo básico de los equipos de iluminación fluorescente es más alto que el de las lámparas convencionales, pero algunos fabricantes están ofreciendo sistemas basados en tubos con una duración estimada de entre ocho y diez mil horas, que se obtienen gracias a la optimización de los sistemas de control y la depuración del diseño de las fuentes de poder.
Algunas mejoras
Los sistemas de luz fría son especialmente adecuados para instalaciones con un alto nivel de automatización donde es necesario contar con equipos que ofrezcan un desempeño estable y exijan un mínimo mantenimiento. Un sistema de luz fluorescente puede resultar ideal para un pequeño estudio de noticias que deba ser operado por una planta de personal reducida, o para estudios dedicados a talk shows o programas de concurso. Al disminuir las emisiones de calor es posible reducir la altura de los estudios e incluso recurrir a sistemas convencionales de acondicionamiento de aire.
Puede ser necesaria una inversión inicial mayor –incluso instalar dimmers o sistemas de control de los que se podría prescindir en una instalación convencional–, y pagar el mayor costo de los tubos fluorescentes, que no necesariamente puede compensarse por su mayor vida útil. Sin embargo estos inconvenientes logran obviarse al considerar la posibilidad de instalar sistemas servoasistidos de bajo costo que permiten reconfigurar un estudio en cuestión de segundos, permitiendo cambiar de aplicaciones prácticamente en tiempo real.
Además, la luz coherente y fácil de controlar de los equipos fluorescentes resulta especialmente adecuada para instalaciones permanentes de bluescreen, como las que se requieren para la utilización de sistemas de escenografía virtual. Y generalmente este tipo de luz permite obtener imágenes de excelente calidad con cámaras CCD de costo relativamente bajo, lo cual admite cambiar los indicadores técnicos de los proyectos para instalaciones nuevas.
Equipos portátiles
Los fabricantes han logrado diseñar unidades portátiles que operan con baterías comunes, lo cual permite disponer de lámparas de alta eficiencia para aplicaciones ENG. En algunos casos los sistemas de control de este tipo de lámparas permiten ajustar de forma dinámica la temperatura de color de la luz.
Las lámparas de piso para aplicaciones BFP se benefician de las mejoras de diseño en las fuentes de poder. El pesado transformador de las lámparas HMI se ha convertido en un adaptador de corriente fácil de manejar y completamente silencioso, y el menor peso de las lámparas facilita el uso de soportes livianos y de menor costo.
En definitiva, los fabricantes de equipos de iluminación han mejorado su oferta de equipos de luz fluorescente para uso profesional, y es de esperar que los precios de este tipo de lámparas desciendan a medida que aumente la escala de su fabricación. TV&V
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